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Fórmulas que contienen proteínas hidrolizadas para la prevención de alergias y de la intolerancia alimentaria en lactantes

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Abstract

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Antecedentes

Las alergias y las reacciones alimentarias son frecuentes y pueden estar relacionadas con los alimentos, incluidas las fórmulas de leche de vaca modificada. Las fórmulas que contienen proteínas hidrolizadas se han usado para tratar a los lactantes con alergia o intolerancia alimentaria. Sin embargo, no está claro si pueden ser recomendadas las fórmulas hidrolizadas para prevenir la alergia y la intolerancia alimentaria en los lactantes sin pruebas de padecer estos trastornos.

Objetivos

Determinar el efecto de alimentar con fórmulas hidrolizadas sobre el desarrollo de alergia e intolerancia alimentaria en lactantes y en niños comparado con la leche de vaca modificada o la leche materna. Si las fórmulas hidrolizadas son efectivas, determinar qué tipo de fórmula hidrolizada es más efectiva, incluidas las fórmulas completa y parcialmente hidrolizadas. Determinar que lactantes se benefician con una fórmula, incluidos los de bajo o alto riesgo de alergia, y los que reciben precozmente una alimentación durante un período corto o prolongado.

Métodos de búsqueda

Se utilizó la estrategia de búsqueda estándar del Grupo Cochrane de Neonatología (Cochrane Neonatal Review Group). La revisión se actualizó mediante búsquedas en el Registro Cochrane Central de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials) (CENTRAL, The Cochrane Library, número 1, 2006), MEDLINE (1966 ‐ marzo 2006), EMBASE (1980 ‐ marzo 2006) y CINAHL (1982 ‐ marzo 2006) y en revisiones previas incluyendo referencias cruzadas.

Criterios de selección

Ensayos aleatorios y cuasialeatorios que comparan el uso de una fórmula hidrolizada para niños con leche materna o con una fórmula de leche de vaca. Los ensayos con más del 80% de seguimiento de los participantes fueron elegibles para su inclusión.

Obtención y análisis de los datos

Cada revisor evaluó de forma independiente la elegibilidad de los estudios para su inclusión, la calidad metodológica y la extracción de los datos. Las medidas de resultado primarias incluían alergia clínica, alergia específica e intolerancia alimentaria. Se realizó el metanálisis usando el modelo de efectos fijos.

Resultados principales

Dos ensayos compararon la administración precoz de fórmula hidrolizada durante un período corto con la alimentación con leche materna. No se informaron diferencias significativas de la frecuencia de alergia infantil o de alergia a la leche de vaca (ALV) en la niñez. Ningún ensayo elegible comparó la alimentación prolongada con una fórmula hidrolizada con la alimentación con leche materna. Dos ensayos compararon la alimentación temprana durante un período corto con una fórmula hidrolizada con la alimentación con una fórmula de leche de vaca. No se informaron beneficios significativos. Un estudio cuasialeatorio grande informó una reducción de la ALV infantil al límite de la significación en los niños con bajo riesgo (RR 0,62; IC del 95%: 0,38 a 1,00).

Diez estudios elegibles compararon la alimentación prolongada con una fórmula hidrolizada versus una fórmula de leche de vaca en lactantes de alto riesgo. El metanálisis encontró una reducción significativa de la alergia infantil (7 estudios, 2 514 lactantes; RR típico 0,79; IC del 95%: 0,66 a 0,94), pero no de la incidencia de alergia en la niñez (2 estudios, 950 lactantes; RR típico 0,85; IC del 95%: 0,69 a 1,05). No hubo diferencias significativas del eccema infantil (8 estudios, 2 558 lactantes, RR típico 0,84; IC del 95%: 0,68 a 1,04), la incidencia de eccema en la niñez (2 estudios, 950 lactantes, RR típico 0,83; IC del 95%: 0,63 a 1,10), la prevalencia de eccema en la niñez (1 estudio, 872 lactantes; RR 0,66; IC del 95%: 0,43 a 1,02), o el asma, la rinitis y la alergia alimentaria infantil o en la niñez. Un estudio informó una reducción significativa de la ALV en los lactantes con atopia confirmada (RR 0,36; IC del 95%: 0,15 a 0,89). El análisis de subgrupos de los ensayos cegados a la fórmula no encontró diferencias significativas de la alergia infantil (4 estudios, 2 156 lactantes; RR típico 0,87; IC del 95%: 0,69 a 1,08) o de la incidencia de alergia en la niñez (1 estudio, 872 lactantes; RR 0,91; IC del 95%: 0,73 a 1,14). Ningún ensayo elegible examinó los efectos de la alimentación prolongada con una fórmula hidrolizada sobre la alergia después de la primera infancia. Hay pruebas de que en los lactantes prematuros o de bajo peso al nacer, alimentados con una fórmula hidrolizada para prematuros, disminuye significativamente el aumento de peso, pero no otros parámetros del crecimiento (perímetro cefálico o talla). Los estudios en neonatos a término no informan efectos adversos sobre el crecimiento.

El análisis de subgrupos de los ensayos con fórmula hidrolizada parcialmente versus fórmula de leche de vaca encontró una reducción significativa de la alergia infantil (6 estudios, 1 391 lactantes; RR típico 0,79; IC del 95%: 0,65 a 0,97), pero no de la alergia en la niñez o del asma, el eccema o la rinitis infantil o en la niñez. Las preocupaciones con la metodología fueron similares a las del análisis general. El análisis de los ensayos con la fórmula completamente hidrolizada versus la fórmula de leche de vaca no encontró diferencias significativas de la alergia o de la intolerancia alimentaria. Los lactantes alimentados con fórmula completamente hidrolizada comparados con los de la fórmula parcialmente hidrolizada tuvieron una reducción significativa de la alergia alimentaria (2 estudios, 341 lactantes; RR típico 0,43; IC del 95%: 0,19 a 0,99), pero no hubo diferencias significativas de la incidencia de alergia en general o de cualquier otra alergia específica. Un estudio (431 lactantes) que comparó la fórmula que contenía caseína completamente hidrolizada con fórmula de leche de vaca informó una reducción significativa de la incidencia de alergia en la niñez (RR 0,72; IC del 95%: 0,53 a 0,97). El metanálisis encontró una reducción significativa del eccema infantil (3 estudios, 1 237 lactantes; RR típico 0,71; IC del 95%: 0,51a 0,97). Un estudio informó una reducción significativa de la incidencia (RR 0,66; IC del 95%: 0,44 a 0,98) y la prevalencia (RR 0,50, IC del 95%: 0,27 a 0,92) de eccema en la niñez.

Conclusiones de los autores

No hay pruebas que apoyen la alimentación con una fórmula hidrolizada para la prevención de la alergia comparada con la lactancia materna exclusiva. Hay pruebas limitadas de que en los lactantes de alto riesgo que no pueden alimentarse exclusivamente con leche materna, una alimentación prolongada con una fórmula hidrolizada comparada con una fórmula de leche de vaca reduce la alergia infantil y en la niñez y la ALV infantil. En vista de los problemas metodológicos y la inconsistencia de los resultados se necesitan grandes ensayos adicionales, bien diseñados que comparen las fórmulas que contienen suero parcialmente hidrolizado, o caseína completamente hidrolizada con las fórmulas de leche de vaca.

PICO

Population
Intervention
Comparison
Outcome

El uso y la enseñanza del modelo PICO están muy extendidos en el ámbito de la atención sanitaria basada en la evidencia para formular preguntas y estrategias de búsqueda y para caracterizar estudios o metanálisis clínicos. PICO son las siglas en inglés de cuatro posibles componentes de una pregunta de investigación: paciente, población o problema; intervención; comparación; desenlace (outcome).

Para saber más sobre el uso del modelo PICO, puede consultar el Manual Cochrane.

Plain language summary

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Cuando los lactantes no son alimentados exclusivamente con leche materna, el uso de fórmulas hidrolizadas para el lactante en lugar de la fórmula de leche de vaca habitual puede reducir la alergia en los lactantes y los niños, aunque se necesitan estudios adicionales para su confirmación.

Las fórmulas para lactantes fueron diseñadas para tratar de disminuir la probabilidad de desarrollar alergia o intolerancia alimentaria. Éstas incluyen las fórmulas hidrolizadas de leche de vaca y de soja. Las fórmulas hidrolizadas fraccionan las proteínas lácteas en proteínas más pequeñas, potencialmente menos productoras de alergia. La revisión de los ensayos no encontró pruebas que apoyen la alimentación con una fórmula hidrolizada para la prevención de alergias en lugar de la lactancia materna completa. Para los lactantes de alto riesgo de alergia que no pueden recibir lactancia materna exclusivamente existen pruebas limitadas de que la alimentación con una fórmula hidrolizada en comparación con una fórmula de leche de vaca disminuye la alergia en los lactantes y los niños, incluida la alergia a la leche de vaca. La incertidumbre sobre la calidad de las pruebas y la consistencia de los resultados indica la necesidad de realizar estudios adicionales.